lunes, 17 de abril de 2023

De los achaques del escritor andante

Qué bicho raro la cervical. Cuando te duele un pie, te duele un pie, y ahí se queda. Vos sabés que te duele el pie. O una mano. O una costilla. Pero la cervical, no. Te pone de mal humor, te trastoca, te hace ver el mundo oscuro; y tenés que estar atento para no creerle, para saber que estás bajo su influjo, y que ya todo va a terminar de pasar, aunque no puedas decir cuándo.

No hay comentarios: