¡Ahora sí!, llegó el momento de que El diario de Toba vuelva a encontrarse con los lectores.
Lo publiqué por primera vez en el año 2009, y luego de un par de reediciones, y de que después quedara agotado durante un larguísimo tiempo, me decidí a encarar su cuarta edición, la cual ¡ya tengo en mis manos!
¿Por qué no sucedió antes? No sé, al escritor independiente no le alcanza con desear, debe también ordenar sus proyectos. Fui publicando nuevos libros, tanto para chicos como para adultos, volví a editar en el medio algunos de ellos, y así los años se fueron pasando.
Mi objetivo último es llegar a tener todos mis libros disponibles simultáneamente. Quizá alguna vez lo logre.
Pero retomando El diario de Toba, quedé muy conforme con el resultado final: textos corregidos (espero que para bien) y dibujos completamente nuevos, a cargo de Lucila Cardozo, quien fue su dibujante original, pero que (al igual que me ocurrió a mí, como a cualquier otra persona) fue creciendo en estos años, y la diferencia en su trabajo se nota.
Además, siguiendo el consejo que la gente me daba en la calle (cosa que ya había hecho con el libro anterior, El mago Pascualito), usamos letra de imprenta mayúscula a lo largo de todos los cuentos, que es la primera que reconocen los chicos: es la letra con la que les enseñan a leer.
Dejo a continuación, como curiosidad, un video donde puede verse la última etapa en el proceso de producción del libro. A mí me gustó recibirlo por parte de la imprenta. Ojalá que a ustedes también les guste.