sábado, 23 de agosto de 2014

El autobús perdido

Pocas veces sucede: completar la lectura de un libro y sujetarlo firme entre las manos, sabiendo que no fue uno más, darle suaves caricias a la tapa, mientras los ojos, evocadores, miran el paisaje que fluye al otro lado de la ventanilla del tren.

John Steinbeck (1902-1968). El autobús perdido. Lo primero que leo del autor estadounidense. Llegó a mí luego de aquella entrega contrariada en González Catán. Y valió la pena. Claro que valió la pena.

Dejo el texto de contratapa:

El accidentado viaje de un autobús rural entre las poblaciones de Rebel Corners y San Juan de la Cruz, en California, al término de la Segunda Guerra Mundial, se convierte en un magistral retrato de personajes y en un acerado estudio sobre los problemas centrales de todos los hombres en todas las épocas: la familia, el sexo, el amor, las ambiciones, las frustraciones y los anhelos. Lejos del sentimentalismo y la autocomplacencia, es un viaje interior hacia el corazón de unos viajeros perdidos en la decepción del sueño americano.