Con el auspicio de la Oficina de Letras de la municipalidad de Tres de Febrero, acabo de publicar Soy Culpable, del que hubiera hablado semanas atrás, y que constituye mi cuarto libro de poesía.
Entre otros poemas, escritos a lo largo de algunos años, se encuentran los ya volcados en este blog Porque soy un soñador, Tristeza y Estás a mi lado. La mayoría de ellos atravesados por el concepto de la responsabilidad absoluta, o de la culpa a ojos abiertos, cuando las acciones personales no alcanzan a corresponderse con los deseos más profundos.
Para no perder la costumbre, saldré a difundirlo por las calles de Buenos Aires, y por sus plazas y parques, ¿por qué no?
Dejo aquí el texto de contratapa.
Soy culpable, responsable, de todo lo que en mi vida hago o dejo de hacer. No existe queja o reproche capaz de ser justificado. El cambio siempre está al alcance de mi mano, y soy yo quien elige o no tomarlo. Esa elección es la que me vuelve libre, absolutamente libre, es la que me eleva o me desciende, es la que me lleva a ser culpable, responsable.